Hilario Cuadros nació el 23 de diciembre de 1902 en la actual localidad de Pedro Molina, departamento Guaymallén, Mendoza, y se convirtió con el paso de los años en una figura central de la música cuyana, destacándose como poeta, cantante, compositor y guitarrista.
Hijo de Anselmo Cuadros, de origen chileno, y Carlota Romero, desde muy pequeño estuvo vinculado a la música popular, y ya en su juventud formó un dúo con su hermano Juan Guillermo, interpretando tonadas y cuecas, etapa en la que surgió su primer apodo, “el chileno”.
A mediados de la década de 1920 conoció al sanjuanino Domingo Morales, “El Quiñao”, con quien formó el dúo Cuadros–Morales, período en el que el periodista Ernesto Fluixá lo bautizó como “el Caballero de la Tradición”, reconocimiento que acompañaría su trayectoria artística.
En 1928 llegó a Buenos Aires en busca de nuevos horizontes y, pocos años después, junto a Alberto Quini y Roberto Puccio, dio origen a “Los Trovadores de Cuyo”, conjunto fundamental del folklore argentino que combinó tonadas, cuecas y gatos con una impronta innovadora.
Durante más de dos décadas, Hilario Cuadros y su grupo recorrieron escenarios de Argentina y distintos países de América Latina, incorporaron instrumentos poco habituales y dejaron un vasto repertorio de obras que aún hoy forman parte del cancionero popular, consolidando un legado que trascendió fronteras y generaciones.





