Esta medida busca posicionar a los parques nacionales, como Lanín, Los Alerces, y Cataratas del Iguazú, como destinos de verano por excelencia para el turismo de naturaleza, manteniendo la accesibilidad a sus múltiples actividades y servicios.
El principal objetivo de esta política es seguir incrementando la visita a las áreas protegidas y fomentar la circulación de visitantes. Las autoridades ratificaron su compromiso de garantizar el acceso de todos los argentinos a su patrimonio natural. Además del beneficio turístico, esta medida tiene un contexto político y económico, ya que "se acompaña el esfuerzo del Gobierno Nacional por consolidar un marco de estabilidad económica y la baja de la inflación".
La APN especificó el tarifario vigente, el cual varía según el parque y la categoría del visitante. Por ejemplo, para los parques más demandados, como Los Glaciares, Iguazú y Tierra del Fuego, la tarifa general diaria para visitantes es de $45.000, mientras que para turistas nacionales es de $15.000 y $7.000 para estudiantes. Para otros parques de tarifa intermedia, como El Palmar o Nahuel Huapi, la tarifa general diaria es de $20.000. Es importante notar que las tarifas congeladas solo aplican al ingreso a los parques, excluyendo servicios particulares como recorridos o tours.
Para fomentar las estancias más largas, la APN ofrece alternativas como el Flexipass, que permite el acceso durante tres o siete días, resultando más conveniente que el pase diario. También existe un pase anual unificado de $225.000 que permite el ingreso ilimitado a cualquiera de los parques nacionales. Adicionalmente, se aplica una bonificación del 50% en el valor del ticket para el segundo día de visita, siempre que se efectúe dentro de las 72 horas siguientes al primer ingreso.
Ciertas categorías de visitantes están exentas del pago de la tasa de ingreso, incluyendo jubilados, pensionados, niños de 0 a 5 años, personas con discapacidad y residentes locales. También están exceptuados veteranos de guerra de Malvinas y guías. Al ingresar, se debe presentar el Documento Nacional de Identidad (DNI) o pasaporte para verificar la categoría y aplicar beneficios o exenciones, y se recuerda seguir las recomendaciones para una visita responsable que garantice el resguardo de la biodiversidad.





