A diez días de la desaparición de Lian Gael Flores Soraide, un niño de 3 años originario de Córdoba, la incertidumbre y la desesperación de su familia crecen sin cesar. El pequeño fue visto por última vez el sábado 22 de febrero en la localidad de Ballesteros Sud, cerca de Bell Ville, cuando su familia decidió descansar durante la siesta. Al despertar, cerca de las 17 horas, notaron que el niño había desaparecido, lo que desató un operativo masivo de búsqueda que aún no ha dado resultados positivos.
En la investigación participan la Policía de Córdoba, la Policía Federal, Gendarmería, el Ejército, y personal de rescate local, con el apoyo de drones y helicópteros. Además, durante el fin de semana, se realizaron 16 allanamientos en Villa María, en busca de pistas sobre su paradero. La principal pista hasta el momento es el testimonio de dos testigos que aseguran haber visto una camioneta blanca, de modelo nuevo y vidrios polarizados, cerca de la casa de Lian el día de su desaparición.
El caso también ha adquirido una dimensión internacional, con la emisión de una alerta de Interpol. El Gobierno de Córdoba ofreció una recompensa de 20 millones de pesos para quienes aporten información clave sobre el niño. A su vez, la hipótesis de un secuestro y su posible vinculación con la trata de personas comienza a cobrar fuerza. La abogada de la familia, Florencia Giuzo, afirmó: “Ya empieza a resonar un poco más fuerte la hipótesis de la trata”, destacando que el niño podría estar fuera del país.
La búsqueda se ha extendido a otras regiones del país, y recientemente, se realizaron allanamientos en Jujuy, donde se incautaron celulares y otros elementos relacionados con una mujer de 74 años, pariente de la familia de Lian y señalada como posible responsable. Esta mujer fue vista abordando un micro en la terminal de Córdoba el mismo día de la desaparición, con destino a Jujuy, y se sabe que permaneció al menos un día en la zona rural de Ballesteros Sud.
Además, la familia de Lian ha solicitado el uso de inteligencia artificial para procesar la gran cantidad de información acumulada durante la investigación, con el fin de acelerar los avances. El abogado Darío Baggini explicó que el volumen de información supera la capacidad humana de procesamiento y podría afectar la eficacia de la investigación. Mientras tanto, la fiscalía sigue trabajando en el caso, pero no ha logrado obtener pistas concretas que permitan dar con el paradero del niño.