El presidente de la Cámara de Supermercados del Chaco, Julio Ramírez, expresó su preocupación por la difícil situación que enfrenta el sector debido al incremento de costos, la creciente inflación y la eliminación de subsidios. En una entrevista, destacó que el comportamiento del consumidor refleja una tendencia cada vez más marcada hacia la elección de segundas y terceras marcas, en busca de precios más accesibles.
Según el titular, la inflación ha sido significativa en los últimos meses, afectando directamente la rentabilidad de los supermercados. Ante esta situación, los supermercados han implementado diversas medidas para estimular el consumo, como “ofertas y negociaciones con proveedores para reducir costos y trasladar esos beneficios a los clientes”.
En cuanto a los precios de los productos, Ramírez mencionó un aumento generalizado, destacando el caso de la carne que alcanzó picos elevados durante las fiestas de fin de año y luego experimentó una reducción. Sin embargo, advirtió que la inflación continúa en aumento, con un promedio mensual del 20%, lo que representa un desafío adicional para los consumidores y los comerciantes.
La incertidumbre económica, marcada por la eliminación de subsidios y la volatilidad del dólar, complica aún más la situación para el sector supermercadista. A pesar de estas dificultades, el presidente enfatizó el “compromiso de los supermercados para proporcionar opciones asequibles a los consumidores y ayudarles a maximizar el valor de sus compras”.
En cuanto al estado de ánimo de los consumidores, Ramírez reconoció que la crisis económica genera preocupación y estrés en la población, pero afirmó que “los supermercados no son responsables de fijar los precios”.