El río Paraná fue escenario de un desenlace fatal tras la confirmación del hallazgo del cuerpo de Pablo Ovando, el guía de pesca de 44 años, quien se encontraba desaparecido desde el martes junto a su hijo Agustín, de tan solo cuatro años. La noticia fue comunicada en la madrugada del sábado por el fiscal Norberto Ríos. Este triste suceso ocurre después de que el viernes por la tarde se localizara también el cadáver del pequeño Agustín.
El cuerpo de Pablo fue encontrado en una zona cercana a donde se había hallado el de su hijo Agustín. Ambos fueron localizados a varios kilómetros río abajo del lugar donde apareció la lancha familiar, la cual estaba anclada y con la llave puesta. Tras la desaparición, la esposa de Pablo, Valeria, alertó a las autoridades luego de no tener noticias de ellos desde el martes 15 de abril.
Con la localización de ambos cuerpos, se dio por concluido el operativo de rastrillaje. El fiscal Ríos informó que se llevarán a cabo estudios médicos a los cuerpos para documentar cualquier dato relevante para la investigación. Sin embargo, no se realizará autopsia, ya que no hay indicios de que se trate de un hecho delictivo. La hipótesis que se manejaba tras el hallazgo del niño era que había caído al agua cerca del canal de navegación al norte de Puerto Reconquista.
Pablo Ovando era una figura muy reconocida y querida en el ámbito del turismo de pesca en la región. Era el fundador de Pirayú Excursiones y dedicó su vida a promocionar el sitio Jaaukanigás como destino turístico. También era piloto de motos de agua y organizador de competencias deportivas. La comunidad de Reconquista se encuentra profundamente conmovida por esta pérdida.