Antes de que el caso de la desaparición de Loan Danilo Peña, el niño de cinco años de la localidad correntina de 9 de Julio, fuera transferido a la justicia federal, los fiscales provinciales Juan Castillo y Guillermo Barry formalizaron la imputación de los seis detenidos vinculados con el caso, enumerando 56 pruebas en contra de los acusados.
Entre ellas, se destaca la prueba número 42, que generó particular interés: "Acta de toma de muestra del pene de Benítez". Bernardino Antonio Benítez, tío de Loan, fue uno de los primeros detenidos y es al único que le realizaron este análisis.
Esto, según publica Infobae, reforzaría la hipótesis de que la desaparición de Loan tiene que ver con una captación de persona con fines de explotación agravada, posiblemente con fines sexuales.
El documento con el que se formalizó la imputación detalla la descripción del hecho y asigna roles específicos a cada uno de los acusados en la mecánica de la desaparición del niño.
¿Qué pasó con Loan según la fiscalía?
El 13 de junio, alrededor de las 15 horas, Carlos Guido Pérez y María Victoria Caillava, conocida como "Viki", captaron al menor Loan Danilo Peña y lo trasladaron a un destino desconocido con fines de explotación. La captura tuvo lugar cerca del domicilio de Catalina Peña, abuela paterna de Loan, en Paraje Algarrobal, localidad de 9 de Julio. Minutos antes, Pérez y Caillava habían compartido un almuerzo con Loan, su padre José Mariano Peña, su tía paterna Laudelina Peña y la abuela.
Para llevar a cabo su plan, Pérez y Caillava contaron con la colaboración de Bernardino Antonio Benítez, Daniel Oscar Ramírez y Mónica del Carmen Millapi. Estos últimos se encargaron de sacar al menor de la custodia de su padre y llevarlo a una zona de montes, aproximadamente a 600 metros del domicilio, bajo la excusa de recoger y consumir naranjas. Sin esta ayuda, los primeros no habrían podido consumar el delito.
El comisario Walter Adrián Maciel, jefe de la Comisaría de Nueve de Julio, también está implicado. Entre el 13 y el 21 de junio, Maciel, siendo uno de los principales funcionarios a cargo de la investigación, "alteró evidencias y entorpeció el curso de la investigación penal". Se le acusa de haber sacado una zapatilla del barro, la cual luego se confirmó que pertenecía a Loan, simulando que él mismo la había encontrado, cuando en realidad había sido hallada por Laudelina Peña. Además, se determinó que la evidencia había sido colocada intencionalmente para desviar la investigación.