Basura espacial en Puerto Tirol: descartan combustión, pero la pieza es tóxica por hidracina

La Justicia ordenó una investigación profunda luego de que un objeto espacial cayera en un predio privado en la zona rural de Puerto Tirol.
27 de septiembre 2025, 11:08hs

El incidente ocurrió el jueves 26 de septiembre de 2025, alrededor de las 18 horas. Vecinos del ex Campo Rossi alertaron a la Policía del Chaco tras observar la caída del cilindro metálico, el cual quedó incrustado en el terreno. Ahora, una Comisión de la Fuerza Aérea intervendrá a través del Centro de Identificación Aeroespacial (CIAE) para investigar y disponer del material.

Minutos después del aviso, efectivos de la comisaría de Puerto Tirol y de la División Bomberos Metropolitana acudieron al lugar y constataron la presencia del artefacto cilíndrico, lo que motivó un amplio operativo de seguridad. El objeto medía 1,70 metros de largo por 1,20 metros de diámetro. Estaba fabricado con fibra de carbono y presentaba un número de serie grabado, así como un sistema de válvulas.

El comodoro retirado Rubén Lianza, director del CIAE de la Fuerza Aérea Argentina, confirmó que se trata de una vaina de tanque de combustible de cohete. Esta identificación vino acompañada de una seria advertencia: el material puede desprender polvo tóxico al tacto y, en su uso original, transporta hidracina, un combustible altamente peligroso para la salud.

Pese a que personal de Explosivos descartó un riesgo inmediato de combustión, la peligrosidad química obligó a establecer un perímetro de seguridad de 30 metros. La fiscal Liliana Irala, a cargo de la causa, ordenó que el cilindro se mantuviera bajo custodia policial y de Bomberos, incluyendo una dotación Hazmat (especializada en materiales peligrosos). El objeto no fue retirado del predio, aunque fuentes de la Policía del Chaco confirmaron que fue movido del lugar y posteriormente devuelto al sitio original por orden judicial.

La pieza, catalogada como "desecho espacial", permanecerá en el campo donde cayó hasta la llegada de los técnicos de la Fuerza Aérea, quienes se encargarán de la deposición final. Este incidente en Puerto Tirol ha dejado en evidencia que la denominada "basura espacial" es una amenaza real que puede impactar en cualquier punto del planeta.

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